Rehabilitación Del Palacio De Camarena
Arquitecto y Dirección de Obra:
Gerardo Ayala Hernández
Colaboradores: Mª Concepción Calvo, Javier Bregante, Jaime Albiñana, César González
Promotor: Colegio Oficial de Arquitectos de Extremadura, Delegación de Cáceres (1986)
Publicaciones: PANORAMA\05. REHABILITACIÓN CAMARENA. GERARDO AYALA\TEXTOS\BIBLIOGRAFÍA.doc
Cáceres. C/. General Ezponda, 9.- 10003
1987 P - 1989 O
El Palacio del Marqués de Camarena, hoy sede del
Colegio Oficial de Arquitectos de Extremadura, se
levantó sobre parte de lo que fue una casa-fortaleza
del siglo XV. De esa antigua construcción queda parte
de la torre en la esquina del edificio. En el interior el
elemento esencial era el claustro central, conservado
perfectamente aunque sometido a diversas transformaciones.
La idea fundamental que ha guiado la definición de
los distintos espacios y la intervención física en el
aspecto final de los acabados y detalles de cada una
de las partes del edificio, ha sido actuar conservando
todo lo que existe, dejando ver, en lo posible, el estado
actual y el paso de los años y, al mismo tiempo, crear
la máxima tensión entre lo antiguo y lo nuevo. El criterio
fundamental de la intervención consiste en una nueva
arquitectura que pone en valor la antigua, potenciando
a su vez el conjunto y presentando las nuevas piezas
como dibujadas en el espacio. De esta forma los revestimientos,
pavimentos, puertas, escaleras, etc., se
colocan de manera que dejan siempre ver lo que existía,
sin ocultar las superficies originales en su totalidad.
Aunque se trató de conservar el sistema estructural, la
introducción de un nuevo uso hizo necesario intervenir
de forma decidida allí donde se consideró necesario.
La inserción de las escaleras con la mínima presencia
pero sin esconder el brillo de los cables y barandillas
de acero inoxidable, la separación de las nuevas entreplantas
de los viejos muros y la colocación de los
materiales, superpuestos en paralelo a los existentes,
establecen un tenso diálogo que evidencia el valor y la
antigüedad del edificio. En el exterior, el criterio básico
ha sido devolver la primitiva dignidad al palacio mediante
dos pequeñas actuaciones: elevar la torre y abrir una
logia de coronación en la fachada más deteriorada.