Comedor Escolar

La zona más alta del terreno, próxima a la afloración de rocas junto a la calle, ha sido la elegida para ubicar el edificio con objeto de no ocupar el área útil de juegos, más horizontal y próxima al colegio. El comedor es un pabellón lineal cuya ambición es respetar la naturaleza del lugar. Está ligeramente elevado entre los árboles, sobre pilares metálicos y sin modificar la acusada topografía del patio, así como el nivel freático superficial y la escorrentía actual de lluvia, cuya recogida se produce mediante las canales existentes. El volumen es, por tanto, un prisma exento entre las ramas y troncos del patio, cuya cubierta se prolonga horizontalmente en los cuatro lados con diferentes vuelos de protección solar y de lluvia extendido sobre el jardín inclinado de tierra. Un gran porche lineal de espera, al que se llega mediante rampa desde el Colegio, marca la entrada principal. El interior del edificio es una galería que flota sobre el sombreado patio-jardín.