La composición de este edificio consiste en la agregación
de piezas complejas, conectadas mediante una secuencia
de espacios de relación. El esquema general corresponde
con un conjunto de recintos en abanico con
centro en el espacio de acceso. Todos estos espacios
se abren al patio de juegos. La entrada, desplazada en
relación con la calle principal, se curva para introducir
al usuario en el vestíbulo. Frente a él, se encuentran
los dos volúmenes de las aulas principales, que se
separan para mostrar la salida al patio de juegos. La
unidad formada por las estancias de bebés hasta un año
se formaliza en un solo espacio compartimentado en tres
zonas mediante mamparas de vidrio.
El edificio se construye en su totalidad mediante
muros de hormigón y cubiertas planas.
La imagen monocromática que le da el hormigón al
exterior, se matiza al interior con los tonos más suaves
de los azulejos, pinturas y revestimientos melamínicos.